Para llegar a la Isla grande de Chiloé, que es el inicio de esta aventura, tomaremos un ferry desde Pargua, cruzando el Canal de Chacao, travesía que dura unos 30 minutos, en el que tendremos vistas del amanecer con el cielo y océano Pacifico que ya anticipan lo bello del paisaje que veremos durante este día. Ya en la isla iremos a localidad de Chacao, visitaremos su plaza principal con dos cañones, vestigios de la llegada de los españoles y la iglesia Matriz de San Antonio de Chacao que su primera edificación data de 1710, con una rica arquitectura y tendremos un primer acercamiento de la cultura local con sus habitantes a través de la artesanía y sus relatos mitológicos.
Continuamos viaje en una ruta que muestra paisajes casi oníricos, de abundante vegetación que se mezcla con las actividades cotidianas de ganadería, agricultura e industria pesquera para llegar a Dalcahue, conocido por sus Iglesias y Artesanías, y donde es nuestro punto de partida para cruzar en barcaza a la Isla de Quinchao, este cruce dura solo 10 minutos donde al frente ya se observa la isla y el flujo de embarcaciones entre islas.
Del otro lado está la localidad de Curaco de Vélez que apenas llegando a la ciudad nos impresiona el cuidado de sus calles y jardines, una conciencia ambiental que ya las quisieran las grandes ciudades, con puntos de reciclaje y señalética educativa. Además, en la plaza principal veremos el museo con una muestra que permite ver el desarrollo cultural de este lugar. En la plaza esta la cripta del Almirante Galvarino Riveros Cárdenas, la iglesia en honor a San Judas Tadeo. Luego unos pocos metros más adelante, podemos caminar por la bella costanera de la ciudad, que cuenta con una pasarela sobre el mar, donde veremos Cisnes de Cuello Negro, Patos, Gaviotas entre otros.
Seguimos el viaje hacia Achao, con una parada en Mirador Alto La Paloma, con vistas del archipiélago que impresionan, veremos la obra maestra que la naturaleza hizo con este lugar.
Luego llegamos a Achao donde visitaremos la plaza con la iglesia de Santa María de Loreto de Achao, monumental construcción que comienza en el 1730 con distintas remodelaciones, su interior con pilares de maderas y decoración tallada minuciosamente. Pero no es todo, iremos también al mercado local, donde se venden los pescados del día, verduras y productos de los emprendedores locales y un ala dedicada exclusivamente a la artesanía, mayormente productos derivados de la lana, tejidos, muñecas, telares de con colores teñidos naturalmente. Aquí tendremos tiempo para recorrer también una bella costanera que nos entrega una linda vista al mar, sus islas, y quizás algunos de los lugareños recolectando algas.
Continuamos al poblado de Quinchao, con parada mirador Putique para unas fotos con las vistas hacia las otras islas y sus paisajes llenos de verde y azul del mar. En Quinchao veremos su iglesia Nuestra Señora de Gracia, construida en madera, que data del siglo XVIII una de las más grandes del archipiélago y declarada Patrimonio de la Humanidad el año 2000. Visita de la playa para luego continuar nuestra ruta al último punto a visitar, Chequián que nos lleva al punto más extremo de la isla de Quinchao donde la playa cuenta con un faro de navegación y está controlado por la Armada de Chile, Ideal para todos aquellos que se animen a explorar lugares que escapan de las rutas habituales y quieren encontrar algo más que paisajes, sino que evocar sensaciones que llenan el alma donde quiera que fijemos la mirada.